lunes, 15 de enero de 2024

MUCHAS VECES LA NIEVE


 

Muchas veces la nieve

sorprende antes de tiempo,

cuando todavía los árboles

no han perdido sus hojas

y alzan sus ramas

ante el frío cuchillo

protegiendo las copas

frente al viento implacable.

Mas no queda esperanza,

todo sigue su curso.

El aire ha enmudecido,

no se escuchan sus gritos

ni la risa en el parque.

Solo un sordo vacío

envuelve el viejo banco

que espera su regreso.

Pero nadie vendrá

a dibujar sus huellas

sobre la alfombra helada.

¿Dónde irás tú ahora

que todo está en silencio?

Has pasado la mitad de la vida

intentando acostumbrarte a sus voces,

la otra mitad te queda

para aceptar su ausencia.                       

 

 

Amalia García Fuertes. En Haciendo, haciendo. Once maneras de mirar de frente. El Perdigón, 2017.

Imagen: Marc Chagall. Violinist on a Bench, 1920.

7 comentarios:

  1. El frío de las ausencias, así se siente. Un abrazo, Amalia y Conrado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. O el frío de las presencias invisibles que perduran. Otro abrazo, salud!

      Eliminar
  2. La blanca pureza del frío silencio.
    Temprano entramado en los gigantes quietos.
    No llores por el pasado.
    Somos el niveo heraldo que garantiza
    Un regresar del ruidoso canto de plateados arroyos.
    Aguas de una nueva feliz primavera.
    Agustín Merino

    ResponderEliminar
  3. http://elblogdesoraustringiliana.blogspot.com/2025/05/todavia-no-somos-piedras-de-amalia.html

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchísimas gracias, Sor Austringiliana, por tan hermosa y emocionante crónica de la jornada de ayer. El diálogo de los poemas, fantástico. Da las gracias también a Agustín. Y un abrazo muy grande para María Ángeles. Salud y poesía!!!

      Eliminar