lunes, 12 de diciembre de 2016

SECRETARIO DE ESTADO



Lavaste tu conciencia

y la colgaste en el cordel

donde se seca la ropa limpia


Pero cayeron gotas de agua sucia

que formaron un charco

y luego un río turbio

que fue a dar a la mar


Por ese mar navegan acorazados

destroyers portaviones

submarinos atómicos

que escupen fuego radiactivo


Los que no tienen nada

sólo tuvieron que lavar su sangre

y recoger los heridos

y enterrar a sus muertos




Óscar Hahn. En un abrir y cerrar de ojos, 2006. En Archivo expiatorio. Poesías completas (1961-2009). Visor, 2009.

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