sábado, 2 de mayo de 2015

Lucha de clases



Los cerditos son perseguidos por el lobo,

pero éste nunca se los come,

si se los comiera se terminaría el cuento.


Boulot, Metro, Dodo,

leen los cerditos en un pequeño cartel

pegado en el cristal del vagón:


Trabajar, volver a casa, dormir.


Los cerditos se duermen

soñando con que un día serán ellos lobos

que perseguirán cerditos.


El lobo sabe que no hay servidumbre

que no sea voluntaria.


Antonio Orihuela. El amor en los tiempos del despido libre. Amargord, 1014.

Imagen: Jared French. Crew, 1941.

No hay comentarios:

Publicar un comentario