Dos hombres buenos fueron juzgados
por la justicia burguesa de los Estados Unidos,
los dos condenados a muerte fueron ejecutados
en la silla eléctrica en agosto
de mil novecientos veintisiete;
Bartolomé y Nicola eran emigrantes italianos
de oficios humildes, zapatero uno y vendedor
de pescado el otro, pero los dos anarquistas.
Sacco y Vanzetti fueron conducidos
a la silla eléctrica por ser honestos
y gritaron a los cuatro vientos su inocencia,
pero el tribunal fue severo
y la sentencia firme,
culpables por la Idea fueron acusados de algo
que no habían hecho, y no hubo clemencia
y ante la silla eléctrica declararon
nuevamente su inocencia,
y en el último gesto clamaron su razón:
-¡Viva la anarquía!
Ante la cruel injusticia de la justicia burguesa.
Cincuenta años más tarde la “justicia” americana
rectificando la sentencia
los declaró inocentes.
Ferran Aisa Pàmpols. Pasión por la matemáticas. Poesía y mito. ACSAL, 2024.
Imagen: Ben Shahn. Bartolomeo Vanzetti and Nicola Sacco, 1931-32.
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