El camino sube torcido.
El camino quiebra subiendo.
Serpiente de cabezas
mano sobre hombro
cabeza gacha
pie tras pie,
ascienden las gentes
hasta el borde.
El primero se separa:
es quien las ha guiado.
El segundo se separa:
es quien las ha alentado.
Como las jambas de una puerta
las incitan hacia el vacío.
Al fondo,
en el valle,
gentes desnudas
se refugian en el bosque primigenio.
Isaac Alonso Araque. Pastos de invierno, 2020. En Voces del Extremo. Poesía y economía. Coord.: Ángela Orihuela Martín. Amargord, 2021.
Imagen: Gustave Doré. Inferno, Canto 26, v. 46-49.
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