Han venido las excavadoras a desahuciar a los topos
Van a hacer un nuevo estadio El anterior lo llenaron de muertos
Qué apuro que nos daba mostrarnos así de rotos a las sombras
David Argüelles. Fisterra. La Vorágine, 2022.
Imagen: Manuel Álvarez Bravo. La tolteca, Ciudad de México, 1929.
Como aquella espantosa cancha ensangrentada durante la dictadura de la bestia de Pinochet, donde torturaron brutalmente hasta asesinar a Víctor Jara, partiéndole las manos previamente para que fuera consciente de que nunca más podría volver a acariciar una guitarra.
ResponderEliminarPor ejemplo, Chiloé. Y por aquí, más cerca, tenemos también bastantes estadios infames. Salud!
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