Han creado otro monstruo artificial,
lo llamarán Progreso,
pero todo el mundo asume su virtualidad.
Poca gente cree en un progreso real;
si se viera que la sociedad avanza,
pero no, hay que votar primero
para después volver hacia atrás.
En la casilla de inicio nos acumulamos
los peones de la partida,
y el dado está trucado,
y el encargado del pistoletazo de salida
no apunta hacia arriba,
zarandea el arma con disimulo
hasta situarnos en el punto de mira.
Prudenci Batalla. En B10lentos. Edicions Malcriàs d’Agràcia, 2022.
Imagen: David Plunkert
El trabajo del Satán capitalista es fácil: solo necesita convencer a las personas de que están haciendo algo nuevo, próspero y diferente mientras les inyecta las mismas viejas mentiras.
ResponderEliminarSalud!
Satán o Dios, lo mismo da que da lo mismo. Salud e iconoclastia!
Eliminar¿Acaso no producen, por ejemplo, ciertas drogas y la poesía, entre otras cosas, realidad virtual, es decir, apariencia de realidad y procesos imaginarios?
ResponderEliminar¿Sabes? La comunidad científica ha determinado que lo que diferencia a los seres humanos de los animales no es la razón, como se venía creyendo hasta ahora, puesto que hay animales que son capaces de establecer estructuras coherentes de pensamiento y acción, sino la voluntad, es decir, el deseo. Y desear, que cuesta poco, es el paso previo imprescindible para actuar y conseguir lo que queremos. Pues la poesía por sí sola, la buena, la que crea estados alterados de conciencia, aunque provoca un tránsito momentáneo de ida y vuelta a un mundo nuevo, no es suficiente para cambiar las cosas. Entonces, ¿dónde está el resto?
Interesante reflexión, Chiloé. También la ideología, la percepción que un sistema socioeconómico tiene de sí mismo, produce una falsa apariencia de realidad que se impone naturalmente a las personas que viven en dicho sistema. La poesía sirve entonces para desvelar esa falsa conciencia, y el deseo para transformar el sistema. Salud!
Eliminar