Después de todo y tanto,
después de todo y nada,
imagina que un día,
de repente,
sales a vivir
y te encuentras contigo,
cara a cara, de forma ineludible,
en libertad.
Manuel Lombardo Duro. Nadie de nada. Piedra Papel
Libros, 2015.
Lo primero que me viene a la mente es: Diógenes.
ResponderEliminarSalud!
Pues la primera imagen que estuve buscando para acompañar al poema era la del Perruno. Coincidencias. Salud!
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