viernes, 27 de marzo de 2015

[Ciervos]



La mujer espera la llegada de los ciervos.

Se sienta en la cuneta y se descalza.

Con la uña más pequeña de su pie

rasca la tierra blanda y enmohecida

hasta arrancar un árbol de raíz.

Con un dedo invisible en su estatura,

remoto soberano primordial

empuja los nogales, los gomeros,

las hayas y los robles, los manzanos.

Después, bajo la lluvia, se arrepiente

mientras le late el pánico en la ropa.

El dedo mutilado es como el odio

del árbol mutilado, en la mujer

que se pinta en los labios treinta y dos

piezas dentales blancas, esmaltadas

con las que no morderse los pezones

ni llorar por los árboles caídos

y que suben despacio, en sus alvéolos,

como subió cada árbol a su copa.

Del tronco descuajado, vuelto torre

gemela de otras torres neoyorquinas

caen los pájaros muertos, el ramaje

como chicharra muerta, los tablones

como féretros muertos para Irak.

La mujer entretanto se avergüenza,

guarda el dedo y su uña, sus dolores,

el esponjoso hueco de la encía

en que ató cada diente su raíz

y levantó una torre mineral.

A su lado, los árboles reposan

su tiempo de madera, griterío

de perros y de niños clausurados,

los brazos y las piernas como ramas

taladas con dolor contra la tierra.

Los animales huyen espantados.

Los ciervos se disculpan y no vienen.


María Ángeles Pérez López. En Voces del Extremo. Poesía antidisturbios. VVAA. Amargord, 2015.

Imagen: Steve McCurry. Rajastán, 1983.

jueves, 26 de marzo de 2015

Propuestas NO



-Escriba la palabra NO y guárdela en una caja de seguridad.

 Compruebe que mantiene su vigencia dentro de diez años.

-Ponga el acento en el NO, el resto vendrá por sí solo.

-Con total seguridad, podemos afirmar que no todos

 los caminos conducen al NO.

-Definitivamente, desde hoy, NO, será un lugar de encuentro.

-En este momento, no escriba NO, piénselo solamente.

-Hay un NO oculto dispuesto a saltar, por sorpresa,

                                                           sobre la cruda realidad.

-También hay un NO que es sólo apariencia, ejercicio

 de simulación, porque decir, a pleno pulmón NO,

                                                           no es siempre agradable.

-La abstracción del NO: no sea pendenciero,

                                   no sea resentido,

                                   no patalee,

                                   no respire,

                                   no calle,

                                   no se enoje,

                                   no sueñe. En fin,

                                   no viva.


Joaquín Gómez. En Voces del Extremo. Poesía antidisturbios. VVAA. Amargord, 2015.

Imagen: Mijaíl Vrúbel. Cabeza de Demonio con montaña al fondo, 1890.

miércoles, 25 de marzo de 2015

A mi hijo



Te preguntarán los flujos migratorios desde el Sur a tu tierra, la estética de Tápies, el sintagma verbal y la función sináptica del sistema nervioso…

Querrán que tengas base de moral y de historia, que entiendas cómo crecen las plantas en los campos, que sepas operar con una o dos incógnitas o que sientas el mundo tal como lo hacen ellos.

No tendrás más opciones que rendirte a sus normas o ser un desclasado feliz –entre otras cosas–, pero ten muy presente que si no te doblegas debes ser fuerte y uno, sensible y destructivo.

Ellos querrán que sepas lo que les hace fuertes.

Yo estaré satisfecho con un “insuficiente”.


Luis Felipe Comendador. En Voces del Extremo. Poesía antidisturbios. VVAA. Amargord, 2015.

Imagen: Steve McCurry. Mumbai, India.

domingo, 22 de marzo de 2015

Glücklich am Park, Osten Berlin



Me pregunto si, igual que hoy en Checkpoint Charlie,

veré, un día, dos senegaleses vestidos de guardia civil

retrátandose con la familia de un policía jubilado

que vuelve a la valla de Melilla a hacer turismo

y revivir, un tanto, la nostalgia de los tiempos pasados.


Entro y salgo por Friedrichstrasse,

bien sé en qué lado estoy.


Antonio Orihuela. El amor en tiempos del despido libre. Amargord, 2015.

Imagen: Raymond Depardon. Niños jugando a “construir el muro”. Berlin, 1962.

jueves, 19 de marzo de 2015

(Crónica, 1970)



                                                      A Yara


Vienen los torturadores con sus haces de muerte.


El cuerpo derribado bajo el golpe metódico

de estos hijos del pus y de la noche

más libre es que nosotros.


Los torturadores son ángeles del orden.


Comemos orden

(con sus haces de muerte)

castrados finalmente como especie.

Comemos orden.

                                   Nunca naceremos.




José Ángel Valente. Treinta y siete fragmentos, 1971. En Punto cero. Poesía 1953-1979. Seix Barral, 1980.

Imagen: Ramon Casas. La càrrega, 1899.