Mientras dure la tierra no han de faltar siembra
y cosecha, frío y calor, verano e invierno, noche y día
Génesis 8:22
Soleadas las manos
Saltamos los asaltos del destino en el timo
en el timo en el timo en el timo en el timo
sanamos desatinos del encierro intrauterino.
Prodigios del arco en señales del parto que parte hacia otro mundo
ejercemos la devastación del género humano
de la memoria fuera de los sueños
en el rincón ominoso
se funden las partículas de oro.
En la humanidad caída sobre el pasto mecido por los vientos
vientosssssz de Chochís y del Negev
oímos el murmullo prenatal de nuestras madres siendo hijas
sus madres pariéndolas
atraversamos los murmullos de las pequeñas muertes
atraversamos los murmullos del agua entre las piedras
adoquines y semillas de Granada
con dulce de guayaba admiramos la luz del verano
sustraemos la fuente del tiempo
anidamos la luz nacida en la palabra Curucusí.
Atraversamos el gesto perhistórico
escrito en las cuevas de San Miserendino
comunicando su paso por el tiempo
su búsqueda hacia un hogar
comunicando la rotación terrestre en las caderas de las madres
por sexta séptima octava novena vez
madres listas para desmalezar la semilla arrojada con desdén,
madres listas para la cosecha que es el parto:
partir de un estado a otro
de niña a mujer
de hija a madre
tal vez abuela.
Es penoso espinozo este camino del partir buscando un hogar
lento el ejercicio del partir los bienes de la tierra que somos
en este abismal horizonte de aguas turbulentas
navegamos corroídas los secretos de guerra y paz
sobre nuestros cuerpos turbados los hombres asientan sus penas
son turbiones de deseo carcomiendo las entrañas y engendrando el abandono.
Sus madres anhelan que vuelva la claridad
y les recuerde la señal del cuidado a la vida
en la noche indescifrable donde rotan sus penas sobre el útero vencido.
En la rotación de las caderas de sus madres
en la rotación de las caderas del mundo que son nuestras madres
algún hombre recordará que es hijo y en meditación oirá el gemido
de sus padres llorando en la guerra
de sus padres exhalando un orgasmo.
Estamos atraversando la rotación de las caderas del mundo
absortas en el aborto que es toda guerra.
Claudia Vaca. Curucusí. LP5 Editora, 2023.
Imagen: Meeri Koutaniemi
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