jueves, 14 de julio de 2022

[Pero después vinieron los de siempre]


 

Pero después vinieron los de siempre

Barrocos pensadores a sueldo

Complejudos varones practicantes de felicidad a jornal

Cerrojazos dramáticos de víspera

Y europamos de tristeza

 

¿Y la libertad?

¿Dónde está la libertad?

 

La libertad y el hombre descansan debajo de una espiga

Y la terquedad de las paredes encuaderna tanta bestia

 

¡Calladle al corazón este tremendo golpe humano!

¡Evitad de una vez para siempre con este impulso de comunión de los hombres!

¡Huid de este húmedo papel!

¡Dejad que el trigo crezca en las fronteras!

 

Nati –natibel– belnamita –nornamita–

Por tus sombras hacia el norte del vietnam

¡Calladle al corazón este tremendo golpe humano!

¡Huid de este húmedo papel!

Entonces desenterramos a los héroes

Les llenamos las manos de protestas inútiles

Y cubrimos de negrura el paisaje

 

Muertes lentas

El regreso de una batalla perdida

Me cortaron el sueño

Un rumor de agonías entraba por mi ventana

Una procesión de derrotas pasaba

Lentamente

Dejando una estela de lágrimas pesadas

 

Un niño me pregunta por el norte del vietnam

¡Un niño me pregunta por el norte del vietnam!

 

Se escaparon varios niños del pulso de sus madres

Les molestaban las costumbres del hogar

Las viejas ponían sillas para el cansancio por las puertas

Organizaban un rosario de retaguardia

Y dios estaba entre los hombres

Entre los hombres sin paso jugando a nada como siempre

 

Era el regreso de una batalla perdida

Nati –natibel– belnamita –nornamita–

Por tus sombras hacia el norte del vietnam

 

¡Calladle al corazón este tremendo golpe humano!

¡Evitad de una vez para siempre con este impulso de comunión de los hombres!

¡Cortadle al camino la línea de conducta!

¡Dejad de nuestro pulso el pulso de dios en la cuneta!

 

Demasiadas oraciones de súplica

Demasiados pendones de tortura

Y al hombre le fluye a cada paso su cobarde y mezquina inteligencia

Nati –natibel– belnamita –nornamita–

¡Por tus sombras hacia el norte del vietnam!

 

He venido a verme

Estoy sudando

He dado mi mano a un enfermo

Nunca pude tocar la tierra donde viven mis amigos muertos

La muerte me ha besado impunemente

Los muertos prolongan mis facciones

Los muertos me tiran de los brazos

Los muertos me empujan por la espalda

¡Quiero salir de aquí! –¡quiero salir de aquí!–

 

El mar devolvía el resto de los que faltaban

Y entregaba amaneceres de primaveras muertas

Había mucha pena –es cierto–

Pero yo estaba entre los árboles cuando habían partido los otros

 

Aquí están los derribos de una generación

Los restos de los héroes

Los zapatos tristes de un cadáver anónimo

Aquí hay una mancha de tinta de expediente

Aquí está el rostro de una muchacha golpeada

 

Toco las inmensidades de los pobres y transpiro el hedor de sus enfermedades

 

Esta pared está invadida de mis manos

¡Quiero salir de aquí! –¡quiero salir de aquí!–

 

Sé bueno hijo mío

Besa la boca al caballo

El burro está desprestigiado

 

Estamos abiertos ante el asco más profundo

Me estoy revolviendo en un cubo de basura

Y el hombre cónclave del mundo

En este ambiente deslucido

Vive entre la copro y la lumacha

Y yo busco en la paramez manchega los elementos portátiles del hombre

La dignidad desalojada de sus domicilios

Los últimos residuos revolucionarios del sur de europa

Caramba señora

La mancha negra de la familia de occidente.

 

 

Carlos Oroza. Évame. Editorial Elvira, 2015.

Imagen: Juliette Bates

No hay comentarios:

Publicar un comentario