Recatados los satélites artificiales sobrevuelan líricamente los vertederos tecnológicos, los retablos de las maravillas de la conciencia las extensísimas plantaciones transgénicas de lo irreal
Para pasar desapercibidos a veces visten el luto decoroso de las cunetas o los delantales de cuero del herrero hacendoso o el camuflaje tenue de las colmenas
Pero nunca se detienen a repostar en las posadas limpias de la evidencia ni dudan un segundo en las encrucijadas de la sangre y la proporción
Los satélites artificiales sueñan con verdes praderas sintéticas donde apacentar rebaños de drones descarriados y blasfeman en voz bajita por la incoherencia de las hormonas o por esa moneda que rodó hasta una alcantarilla y se perdió para siempre en el mar
Sacha Viveros. El borrador absoluto. Nebulosa, 2018.
Imagen: Stanley Kubrick. 2001: A Space Odyssey, 1968.
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