Como nubes irremediables los
periódicos viejos vuelan hacia el horizonte arrumbado de las fieras extinguidas
Bajo sus alas de barreduras
las bujías del bosque parpadean agonizantes y los ríos arrastran las palabras
descoyuntadas que nadie quiso oír
Alguien todavía sonríe en la
azotea de los rascacielos pero ni siquiera los mendigos más optimistas envuelven
ya sus jirones en las hojas amarillas de lo que fue actualidad
Es hora de partir, tú
también, que tuviste el conocimiento del mundo, tú también, que pensabas que el
porvenir olería a guirnalda de nomeolvides y que construiste con confianza tu
casa sobre la negra roca de la eternidad y la propaganda.
Sacha Viveros. El borrador absoluto. Nebulosa, 2018.
Imagen: Constantine Manos. Χανιά,1962.
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