sábado, 2 de diciembre de 2017

Mi solidaridad



Con el pueblo

sahararui

-conviene siempre empezar

citando a los clásicos-.

Con las mujeres

polacas,

en cuyo país

han aprobado

-escribe la periodista-

una dacroniana ley

contra el aborto.


Mi solidaridad

con los refugiados

-quién podría negársela-;

con las víctimas

de todas las guerras;

con los que sufren

-así, en general,

o apellidando cada caso-

un terremoto

un tornado

una inundación

la lacra

del terrorismo.


Mi solidaridad,

en fin,

con las causas.


Mi solidaridad

-digo-

hasta chapotear

solidario

en el limo

satisfecho.





Pablo Macías. En Surada Poética 2017. Residir, Resistir, Recibir. La Vorágine, 2017.

Imagen: Chris Steele-Perkins. Ghana, 1983.

2 comentarios:

  1. Bondad

    "Qué bueno eres, ¿no? Eso es lo que esperas que diga la gente. Para eso lo escribiste, para que todos sepan lo bueno y lo compasivo que eres, lo indignado que estás con estas cosas terribles que le pasaron a la humanidad, ¿no? Mírenme, admírenme, yo estoy del lado de los buenos, yo condeno, yo denuncio. Léanme, quiéranme, denme premios a la compasión, a la bondad."

    Juan Gabriel Vázquez.

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    1. Dos textos, el poema y el que tú aportas, absolutamente similares. Por desgracia, el mundo está lleno de gente así, gente que forma parte del problema, porque su "bondad" y su ego les anulan toda conciencia. Salud!

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