El ratonero no tiene nada
que reprocharse.
Los escrúpulos le son ajenos
a la pantera negra.
No dudan de lo apropiado de
sus actos las pirañas.
El crótalo se acepta sin
complejos de sí mismo.
No existe un chacal
autocrítico.
El tábano, la langosta, la
tenia y el caimán
viven como viven y así están
satisfechos.
De cien kilos es el corazón
de la orca,
pero no le pesa.
Nada más animal
que una conciencia limpia
en el tercer planeta del
Sol.
Wislawa Szymborska. El gran número, 1976. En En El gran número. Fin y principio y otros
poemas. Traducción de Carlos Marrodán Casas. Hiperión, 1997.
Imagen: USA, 1933.
No hay comentarios:
Publicar un comentario