Pero la noche es una rueda orante
que chirría en la jaula de un ratón anaranjado.
Es un remirar de serpiente hartada
por las arenas venideras, mientras
los niños, abrazados a los osos,
duermen.
A veces, huele a gas, creedme.
Y todo es clamor bajo la luna.
María Ángeles Maeso. Trazado
de la periferia. Marisma, 2018.
Imagen: Valentín Gubarev. Не
спится.
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