La de veces que te habrás revestido
de medio pontifical
y a esperar
como si el lugar natural
del poema no fuese
el billete del autobús
o mejor
la servilleta del bar.
Antonio Pereira. Una tarde a las ocho. Eolas, 2023.
Imagen: Gordon Parks
O en el corazón de la ventana,
ResponderEliminarcándidamente trazado por el dedo
en el vaho surgido de los labios amados.
Salud!
Bien apuntado, Loam ... a veces, el "pontifical revestimiento" puede desvestirse en la candidez del vaho y el cristal.
ResponderEliminarPero con suma cautela, que en literatura abundan también los falsos profetas y las parroquias celebrantes de lo ideal. Salud a ambos!
EliminarJaJaJa !!! Sí !!! ... pero, también cuidado con la cautela, pues ocasiones, el daño es debido más a su abundamiento que a su falta.
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