El Escorial inerte. El viento pugna
por quebrantar su trágica molicie.
Su ser es movimiento, es su perpetuo
sostenerse a sí mismo, derramarse
más allá de sí mismo.
Molicie de la mole, o bien escoria,
masa que deja al transcurrir la historia.
Molicie de la historia,
una mole de escoria.
El Escorial, escoria de la historia.
*”La vida en torno: Muerte y resurrección” en El espectador II, 1917.
José Emilio Pacheco. No me preguntes cómo pasa el tiempo, (1964-1968). En No me preguntes cómo pasa el tiempo. Poesía II (1964 – 1972). Visor, 2010.
Imagen: Ignacio Zuloaga. Vista de El Escorial, c. 1905.
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