Las calles están silenciosas
y desiertas. Solamente cruzan
las sombras de los árboles.
No se oyen pájaros, bocinas
ni siquiera el motor inminente
de un auto siempre aproximándose.
Los ascensores, las escaleras
y pasillos de los edificios, vacíos.
En una cocina un charco
en torno al refrigerador
que se deshiela
con sus bandejas desnudas
y la puerta abierta.
Conservada en el hielo
no hay más que una arveja
muy pequeña, redonda y verde.
Gonzalo Millán. Vida,1984. En Trece lunas. FCE, 1997.
Imagen: Ulrich Wüst. Berlín, 1982.
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