jueves, 25 de abril de 2024

VALE. EL APOCALIPSIS LO HACEMOS NOSOTROS


 

Vale, lo hemos entendido.

Nos forzaste a venir a este mundo sin preguntarnos

si estábamos de acuerdo.

Lo hicisteis porque creéis que tener hijos es divertido,

pero para nosotros no lo es. Nuestro hermano Zain,

que aparece en la película de Nadine Labaki

Cafarnaúm, denunció a sus padres por haberle

dado a luz en un campo de refugiados sirios,

y todos nos unimos a él.

Vale, nos habéis convocado a este mundo de mierda

donde el aire nos asfixia

en Taranto y Nueva Delhi,

donde hay que besar el culo a algún mierda

con corbata si quieres tener un salario de mierda.

Vale, ustedes nos han traído a esta mierda de mundo

de mierda donde para ir a la escuela

tengo que vender veinte años de la vida que tendré

si la tendré

y verás que no la tendré

porque nos trajiste a un mundo

donde los estados asesinos tienen la bomba nuclear

y casi todos los líderes que vosotros habéis elegido

son como Hitler Modi Hitler Trump

Hitler Dutarte Hitler Erdogan Hitler Putin Hitler

Xi Jing Ping Hitler Netanjahu Hitler Macron Hitler

y sigue tú si te apetece.

 

Entonces Greta Thunberg está en huelga

buena chica buena chica un poco ingenua

pues aún cree que los poderosos de la tierra

le hacen caso.

Pero no hay más poderosos en la tierra

hay un monstruo inexpugnable y abstracto

que nos ha atrapado y nos está sofocando.

Un millón de niños buenos han seguido a Greta,

la mayoría blancos pero son como nosotros:

no son culpables de lo que pasó en el siglo pasado

no son culpables de la extracción y explotación

no son culpables de las partículas finas

que nos provocan el asma y el cáncer

no son culpables de las inundaciones

y de los drones que bombardean

no son culpables de los niños asesinados

por los israelíes en el gueto de Gaza.

No tienen la culpa ni memoria de las promesas

tontas de las esperanzas tontas

de las tontas palabras progresistas y esperanzadoras

que se creían nuestros ingenuos coetáneos de hace

medio siglo en milnovecientossesentayocho.

Vale, lo entendimos, no hay posibilidad de reducir

el polvo fino que nos causa el cáncer

antes de treinta años.

Un impuesto sobre el plástico colapsaría

los beneficios de las empresas de embalaje

de Emilia, así que no se puede poner un impuesto

sobre el plástico y el plástico ha invadido los mares,

ya no podremos nadar.

Vale, no hay ninguna posibilidad de desmantelar

las bombas nucleares que pronto explotarán

en Karachi e Islamabad.

Bosques en llamas en California

Bosques en llamas en Siberia

Bosques en llamas en Amazonia

Bosques en llamas en Australia

Y todo este fuego no lo prendimos nosotros.

Vale, lo hemos entendido, no tendremos

un salario suficiente para irnos de vacaciones

como hacía el abuelo

trabajador de Italsider

que ahora se está muriendo de cáncer, al menos

a sus 30 años podía irse a la playa

diez días al año

con toda la familia

hace 40 años.

 

Entonces sabes qué te digo:

hemos entendido que el espectáculo se llama

Apocalipsis

y que el Apocalipsis es un espectáculo excitante

pero solo si yo soy el director, solo si los actores

son mis compañeros

que tienen 16 años

que tienen 13 años

que tienen 12 años y queman la escuela

y queman la iglesia

y queman la casa

y queman toda la ciudad

sabes qué te digo

mejor el apocalipsis iluminado por los fósforos

que compré en el estanco

mejor el apocalipsis que puedo grabar

con mi cámara Samsung 340

armada con los últimos programas de Sony

y transmitida por doquier en las memorias

olvidadizas de Instagram.

Arde chico arde

que sea un final eufórico

nadie se salvará

atraparemos al hijo del amo

ya le gustaría fugarse con la nave espacial Tesla

hacia un planeta lejano

le atraparemos antes de que pueda subir

a su starship interestelar.

 

Vale, lo hemos entendido con vuestra obsesión

por las ganancias y el banco

habéis creado condiciones de extinción inevitable.

La extinción me vale

mientras sea una explosión

no una muerte lenta, dolorosa y agotadora

y aburrida

como la vida de mi padre que trabaja en un banco

que trabaja en la fundición

que trabaja para la compañía

que le provoca el cáncer

y el asco.

 

 

Franco Berardi. En Se agota el tiempo. Rebelión poética por el clima y contra la crisis ecosocial en apoyo de Rebelión Ciéntifica y los ecologistas criminalizados. VV. AA. Coordinación: Militancia Poética y Antonio Orihuela. La Vorágine, 2024.

Imagen: Christer Strömholm

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