domingo, 5 de julio de 2015

El niño bueno



No sabré desatarme los zapatos y dejar que la ciudad me muerda los pies,

no me emborracharé bajo los puentes, no cometeré faltas de estilo.

Acepto este destino de camisas planchadas,

llego a tiempo a los cines, cedo mi asiento a las señoras.

El largo desarreglo de los sentidos me va mal, opto

por el dentífrico y las toallas. Me vacuno.

Mira qué pobre amante, incapaz de meterse en una fuente

para traerte un pescadito rojo

bajo la rabia de gendarmes y niñeras.


Julio Cortázar. Salvo el crepúsculo. Alfaguara, 1985.

Imagen: Martín Chambi. Policía con niño. Cuzco, 1923.

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