domingo, 11 de julio de 2021

[¡Míralo, qué cara de gorrión! No veas]


 

¡Míralo, qué cara de gorrión! No veas

cómo le daba al chupe.

El carné de policía

abre

muchas puertas

y

cierra

muchas bocas.

Tiene huevos.

 

 

Conrado Santamaría. Lóbiter (Archivo de crisis). Amargord, 2019.

Imagen: Robert Doisneau. El Infierno. París, 1952.

4 comentarios:

  1. La cadena de mando y ordeno, ya se sabe: se relame la sonrisa de hiena bajo el bigote trampero.
    Salud, poeta.

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    1. Y la aceptación, LaNanaFea, la dichosa aceptación. Salud!

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  2. Buen día, Conrado.

    Recuerdo una vez, en Barcelona, en un bar atestado de alegres amigos y camaradas. Entró un policía (gris, en aquella época) que, además de serlo, se había granjeado una espantosa fama. Se hizo un súbito silencio. Me acerqué a la barra, a escasa distancia de donde él estaba, e invité en voz alta: ¡Una ronda para todo el mundo!... y girando mi cabeza hacia él, añadí... ¡Menos para él!
    Volvió el alegre bullicio. Nadie se ocupó más de aquella sombra.

    Salud!

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    1. Una lección de lógica, ética y estética. Me preguntó si caería o no en saco roto. Salud!

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