El hambre, la indigencia, el dolor, la humillación y la muerte.
Palabras tan difíciles de pronunciar. Aun cuando el exterminio se extienda sobre los campos
como antes lo hacía el cielo sin nombre.
Aun cuando la música se afile en muérdagos de rosa o hierba luisa.
O que el olvido exaspere el cerebro de la oruga antes de morir en el futuro de la crisálida
devenir del cuerpo en aire y desnuda intemperie terrestre
piedra o carbón.
Vinicio Manotoa Benavides. Los cuadernos del desamparo. Cuerpodevoces Ediciones, 2021.
Imagen: Saul Landell
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