¿A qué quieres resistirte?
Álex Gil
No ves que el virus entra
ya en los cuerpos, viene
cabalgando en los hombros
de todos nosotros. No temas,
si no es el virus será el tiempo, el dinero,
o el otro quien te tuerza. Deja de invocar
al plástico o a tus cremas para negarte
a ser una vieja vencida en un resort turístico.
Las listas de los más vendidos
se hacen sin ti, niñas limpias ocupan
tu puesto bajo tus esposos. Pero
también, date cuenta por fin,
si estás fuera de foco serás libre,
nadie mira más allá de los programas
televisados:
ahora puedes entrar a donde quieras,
eres culpable e ilegal: cógelo todo.
Que el barro de las lluvias
ácidas y ralas de este clima huraño oculten
la huella hendida que vas dejando
tras tu paso.
Cristina Morano. En (Tras)lúcidas. Poesía escrita por mujeres (1980-2016). Edición de Marta López Vilar. Bartleby, 2016.
Imagen: George Tooker. Mirror IV.
Está bien, en el vapor del olvido arrojaré cada ultraje, por siempre insignificante. Borraré la múltiple palabra del taimado, solo hábil a las ganancias y al desequilibrio: el éxito siempre criminal.
ResponderEliminarCuidaré la semilla de los logros, a todos fructífera.
Palabras también de huella hendida. Que no se borren. Salud, LaNanaFea!
Eliminar