Soñé con John Conford.
Es un día de finales de junio
del año 1936.
El cielo es azul
y la temperatura es cálida.
Huele a rocío y a hierba fresca.
Un hombre joven y hermoso
pasea de la mano de su novia
joven y hermosa como él
por la campiña británica
que hoy más que nunca
parece un cuadro impresionista
pintado por Georges-Pierre Seurat.
Viéndolos así
caminando juntos de la mano
nadie diría que los dos sueñan
con la revolución proletaria.
Viéndolos así
jóvenes y felices
qué lejos queda hoy
la Guerra Civil española
las Brigadas Internacionales
los naranjeros y las ametralladoras
en los olivares de Jaén
el frente de Lopera
donde él encontrará la muerte
antes de que acabe el año
luchando contra el fascismo.
Viéndolos así
qué lejos estos versos suyos:
Y si la suerte acaba con mi vida
dentro de una fosa mal cavada,
acuérdate de toda nuestra dicha;
no olvides que yo te amaba.
Viéndolos así
qué lejos
todo el dolor
que está por venir.
Rafael Calero Palma. Cuando atraviesas el fuego lamiéndote los labios. Ediciones enemigo público número uno, 2017.
Imagen: Georges-Pierre Seurat. La Seine à la Grande-Jatte, 1888.
No hay comentarios:
Publicar un comentario