A las empleadas de hogar latinoamericanas
que cuidan mayores y limpian edificios
Mi madre, trabajadora de lunes a lunes,
se ha escondido del cosmos.
Han desaparecido sus huellas dactilares
por el hipoclorito de sodio, la lejía.
Una mujer sin nombre que rebusca
devastada su propia identidad.
¿En qué escalera las habrá dejado?
Intenta recordar el lugar exacto donde
pudo haberlas perdido.
La lejía la convirtió en anónima.
¿Cómo nombrar lo que no tiene nombre?
En esas escaleras que pisáis
están fosilizadas las huellas de mi madre
fundidas con hipoclorito sódico.
William Alexander González Guevara. Los nadies. Hiperión, 2022.
Imagen: Yuri Pímenov. Обыкновенное утро.
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